Reseña: The Girlfriend Experience

The Girlfriend Experience

2009

Director: Steven Soderbergh

Steven Soderbergh es uno de los directores más interesantes hoy en día. No importa si esta haciendo blockbusters de verano como Ocean’s 11, biografías épicas como Che o pelis independientes locas como Bubble, siempre alcanza cierto nivel de éxito en todos sus trabajos. The Girlfriend Experience, su último film experimental es otro triunfo para el director, quien encuentra el lado más humano en el peor de los personajes.

El film sigue las tribulaciones de Chelsea (interpretada por la actriz porno Sasha Grey), una señorita de compañía new yorkina la cual provee a sus clientes “la experiencia de novia” donde es pagada por actuar como novia de hombres solitarios por un corto periodo de tiempo. Este periodo puede o no incluir sexo como parte de la experiencia, todo depende de las necesidades de su cliente. Durante la historia, ella tiene que balancear su trabajo con la relación que mantiene con su novio.

La historia se presenta de una manera no-linear y es contada a traves de una entrevista entre Chelsea y un reportero, una conversación con su amiga y por ella misma narrando sus entradas de blog. Este método de narración es confuso y hace a la historia un poco difícil de seguir, pero después de la primera hora es fácil conectar los puntos y disfrutarla.

Soderbergh y sus escritores hacen un gran trabajo dejando a la audiencia entender los personajes y sus problemas. Uno nunca se siente asqueado con Chelsea pues es mostrada como una mujer fuerte e inteligente quien no está avergonzada de su trabajo y aún así la alentamos a salir de ese estilo de vida y hacer la transición a una vida y relación más estable. Tampoco se siente pena por sus clientes aunque se debería pues son hombres patéticos, la forma en la que la historia esta construida hace que sintamos empatía por los personajes. Ciertamente no son personajes con los que se pueda relacionar, pero por lo menos se pueden entender.

Técnicamente el film se ve muy “amateur”, se puede ver que Soderbergh solo experimentaba con unas cámaras baratas y el software de edición y sin embargo, es compuesta por varías toma interesantes y la edición, aunque un poco áspera, le da un gran estilo que se ajusta muy bien al tono visual de la película. Algunas de las tomas y movimientos de cámara me recordaron a Love & pop y Shiki-Jitsu de Hideaki Anno, lo que no es nada malo.

Tal vez lo más sorprendentemente bueno de la película es la actuación de Sasha Grey. Si alguna vez has visto una porno notaras que no requiere ni un poco de talento actoral para estar en una, por lo cual no esperaba mucho de ella. Sin embargo, para mi sorpresa, Grey hace un excelente trabajo, interpretando a Chelsea como fuerte, inteligente, simpática, emocional más no vulnerable pero más que todo humana. Ella no es el objeto sexual que sus clientes creen y Grey hace un fantástico trabajo revelando sus emociones internas.

Mi única queja con la película es la carencia de un “cierre”, lo que me dejo inmensamente insatisfecho pues sentí que faltaba un acto final y la última escena es muy ambigua para su propio bien. Aún así recomiendo esta película, esta excelentemente construida, bien actuada y lo mejor de todo es que a diferencia de otros films experimentales, no es pretenciosa. Es una película fantástica.